viernes, 7 de mayo de 2010

Mi confrontación con la docencia



¡Buenos días grupo¡
Haré memoria y empezaré por reconocer cuáles han sido mis mayores problemas en la docencia. Siempre he trabajado con adolescentes y cuando tuve que dar mi primera clase pensé en imitar a mi maestro universitario “Fernando Benítez” (periodista y escritor). Ahí el primer error, pues no consideré que era una población con un nivel de conscientización diferente hacia el aprendizaje.
Inicie en Conalep con una enseñanza conductista, saturándolos de trabajos y siendo intolerante con el fin de cubrir el programa de la asignatura. Por otro lado, eso de imitar al maestro con una cátedra, tampoco lo podía hacer porque no tenía el nivel, la experiencia ni la simpatía.
Además en ese entonces, (1993) Conalep, no nos pedía planes de trabajo exhaustivos, sólo el avance programático; las juntas de academia eran para organizar algún evento lúdico en los días festivos y entrega de calificaciones. Además no podía establecer una comunicación acertiva con mi jefe de materia porque él era Ingeniero Civil, mientras mis asignaturas eran Inglés, Español y TLR
Posteriormente, cuando ingresé al Cobach, como requisito tenía que tomar dos cursos de Metodología y hacer el Diplomado de Inglés. Fue ahí, donde aprendí a planear mis clases, desde a quién iban dirigidas, hasta minuto por minuto establecer qué, cómo y paraqué se enseñaba. Poco a poco fui mejorando mi práctica y me di cuenta de que en cada semestre debía replantear mis métodos y técnicas.
Por lo tanto, seguí tomando cursos que me apoyaran como el de Evaluación, que me abrió los ojos para saber en gran medida porque reprobaban mis alumnos; el de Motivación que nos apoya en la permanencia; el de adolescencia, que nos plantea dirigirnos a los alumnos desde su problemática, etc.
Sin embargo, otra reto que enfrento es: qué tanto lo puedo llevar a la practica con resultados óptimos? En mi caso siento que no lo he logrado ni siquiera en un 80%. Sin embargo, tengo compañeros que toman muchos más cursos que yo, con una alta categoría académica, con reconocimientos por desempeño; y sus niveles de aprobación y deserción son de menos del 50%.
Es por eso que actualmente en Cobach, después de tomar un curso hay dos o tres sesiones de retroalimentación programadas durante el semestre para analizar su aplicación y resultados.
Considero que la labor del verdadero docente es titánica y no basta con ser responsable y cumplir con todo lo que te pidan, sino de tomar en cuenta una enorme gama de herramientas para formar un estudiante capaz de enfrentar su realidad.

¡Hasta pronto¡

1 comentario:

  1. Hola María Eugenia
    Gracias por invitarme a tu blog
    El comentario que haces respecto a la labor de la docencia es muy cierto es algo que se debe tomar con mucha responsabilidad y respeto ya que el material con que trabajamos no es inerte, tiene vida, ideas, problemas, sentimientos y depende mucho de nosotros para terminar el moldeado que será parte de una vida futura.
    Bonito día.

    ResponderEliminar